
Cada noche te rencarnas,
me trasportan sobre
destellos que me embelesan.
Seda y fuego, de tu esplendor.Perfilas en mí, tu corona perfumada
abarcas mi infinito con tu destello.
Quiero tocarte, sentirte, cautivarte.
Tu albor se remplace en una capa suave
de luz, de tu silencio, de tu intimidad.
Andar sobre ti, recorrer tu esfera de brasas.
Sabiendo que me esperas
evocas, sientes y pretendes, rio de plata.
Tu vereda será mi vida.
Alcanzar tu tierra, mi empeño y tus entrañas
con sentencias de dulces alabanzas,
para conquistar en tu corteza mi camino
y mi néctar se aúne con tu alma.
Juntas seremos la luna de tu plata